El 8 de febrero de 1913, a requerimiento del general del Cuerpo, Teniente General Ángel Aznar Butitueg, como consecuencia de la devoción generalizada del personal del Cuerpo a la Virgen, en su advocación del Pilar, que había sido transmitida desde niños a los alumnos del Colegio de Huérfanos de Valdemoro, el Rey Alfonso XIII firmaba la Real Orden por la que se declaraba Patrona de la Guardia Civil a Nuestra Señora la Virgen del Pilar.

Apenas medio siglo antes, el 19 de agosto de 1864, se había incorporado al Colegio de Guardias Jóvenes de Valdemoro el primer Capellán Castrense, Miguel Moreno Moreno, quien habilitó el aula de instrucción primaria como Capilla del Colegio y colocó en la misma una pequeña imagen de la Virgen del Pilar, siendo declarada Patrona de la Compañía de Guardias Jóvenes un mes después. Desde entonces, las diferentes promociones de “Polillas”, al finalizar su etapa formativa y ser destinados a diferentes puntos de la geografía española, fueron difundiendo su fe en dicha advocación mariana entre el personal de la Guardia Civil y sus familias.